miércoles, 3 de agosto de 2011

Solicitud de Constitución de la Asociación Cubana Para El Desarrollo de la Educación Infantil.

El Estado Cubano creado desde 1959 bajo el liderazgo de Fidel Castro es considerado por muchos de sus seguidores como benefactor, centralista y jerárquico. Ha sido hasta hoy el principal responsable de las demandas sociales planteadas principalmente a través de su partido político: El Partido Comunista de Cuba.

Siempre ocurrió de un modo u otro, ahora más que antes, que el contexto es el gran organizador de los diseños organizacionales. Con la actual tendencia a la globalización, todo está intimamente relacionado y el ideal de lo previsible se ha convertido en “lo cotidiano de la incertidumbre”.

La sociedad cubana actual, quiéralo o no, está obligada al cambio. Las suposiciones y alternativas son los nuevos ritmos musicales de nuestra época. En todas partes muchos paradigmas se desvanecen y ya es difícil prever a largo plazo las nuevas tendencias. Cada día las soluciones a problemas de la ciudadanía han obligado a gobiernos de la mayor parte del mundo a relacionarse con la sociedad civil y las ONG.

Más tarde o temprano Cuba tendrá que adaptarse a la idea de que sin la ayuda y compromiso de la sociedad civil le será muy difícil, por no decir imposible, resolver y detectar los incesantes cambios que demanda la sociedad moderna actual. Máxime si está bajo las premisas de transformaciones económicas que recién comienzan a gestarse en un país donde todo escasea y nada parece ser estable.

Sucede que los funcionarios de un gobierno son gestores de esquemas y estructuras pre- establecidas. La sociedad civil de cualquier parte está formada por líderes que independientemente del estilo de su liderazgo, tienen en mente algo que difícilmente pueda asumir un funcionario estatal: Pensar en los necesitados y beneficiarios según sus necesidades, más o menos comprensibles para el gobierno, pero siempre prontas a ser resueltas por la sociedad civil y sus líderes.

Los funcionarios tienen poco tiempo, los miembros de la sociedad civil siempre encuentran el tiempo para sus necesitados y beneficiarios. Este pequeño aspecto marca una importante diferencia.

A los afectados no les importa si la solución es bonita o fea. Sencillamente quieren resolver su problema de la mejor forma y rápidamente. David y Goliat son los mejores ejemplos para comparar a la sociedad civil y los problemas que enfrenta el Gobierno Cubano. Goliat es poderoso pero la honda está en la mano de David y con la ayuda de Dios, dirán algunos, venció. El Dios de la sociedad civil es saber donde golpear para resolver o paliar el conflicto.

El 1ro de agosto se presentó la Solicitud de Constitución de la Asociación Cubana Para El Desarrollo de la Educación Infantil. Podrán respondernos negativamente bajo el más inverosímil de los pretextos.No hay apuro. Esperemos que el sentido común y la buena fe se impongan. Así dice el sabio proverbio: “No hay mal que dure cien años, ni cuerpo que lo resista”.

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