martes, 27 de septiembre de 2011

Un punto de vista sobre la homofobia cotidiana

La patria es dicha de todos, y dolor de todos y cielo para todos, y no feudo ni capellanía de nadie.
José Martí


En el ámbito escolar cubano no se presta la debida atención a la orientación sexual de los estudiantes.
A mi juicio somos una sociedad homofóbica de forma consciente o no. De hecho algunos de los peores insultos que se utilizan contra alguien son: tortillera (lesbiana) o pájaro ( gay) . Hubo épocas cuando otras expresiones desafiantes eran marimacha para las hembras y pato, flojo o loca para los varones.

Los pocos avances en materia de diversidad sexual que se han dado en el país obedecen a diversos factores, algunos de ellos, inevitables. La población hasta cierto punto ha ganado algo de comprensión e interés sobre el asunto, se abre paso tímidamente un cambio de posturas frente a la homosexualidad.

No es difícil para un(a) experimentado maestro(a) discernir con bastante efectividad la orientación sexual de sus educandos en la escuela primaria. La actitud que asumen los docentes, por falta de mejores estrategias y entrenamiento, oscila entre “alertar” a los progenitores o hacerse de la “vista gorda” dado el caso que la heterosexualidad del niño o niña no esté “bien definida” aparte del consiguiente comentario en el claustro docente.

El tema de la homosexualidad ha sido tratado con mayor o menor éxito por artistas de la plástica, cineastas- la laureada película “Fresas y chocolate” es un buen ejemplo- así como por intelectuales y escritores(as). El clímax llegó acompañado por Mariela Castro, directora de CENESEX, y la amplia difusión de sus propósitos. Otras iniciativas a favor de los derechos de las lesbianas y gays se fortalecen. Entre las más reconocidas está el Observatorio Cubano de los Derechos LGBT dirigido por Leannes Imbert Acosta.

A mi modo de ver el asunto, cualquier iniciativa ciudadana a favor de los derechos humanos de las minorías es válida. En el caso de los gays y las lesbianas se debe destacar lo real del sufrimiento a que se les somete en la mayoría de las aulas. Cualquier manifestación de un adolescente es hasta cierto punto muy emotiva, pero si el adolescente es gay o lesbiana lo asumen como exagerado o indecente.

No son raros los casos de ataques físicos y sicológicos a los chicos y chicas de enseñanza secundaria y preuniversitaria, tanto por parte del alumnado como de sus profesores. Hace algunos años presencié como el sub- director de una escuela secundaria humillaba diariamente a un alumno mientras que todos los padres y madres del resto del estudiantado casi estábamos convencidos de que él también era gay. La actitud de la familia del niño siempre me resultó inexplicable. Aprendí después, que el conocimiento y coraje necesario para la defensa de alguien pasa por la propia autoestima, las leyes y/o el entrenamiento relacionado con el conflicto.

Ya se han celebrado en Cuba varios matrimonios de transexuales. Meras gotas de agua en el mar de la ignorancia y el desprecio con que los ve la mayoría de la ciudadanía. La escasa información sobre el tema, los prejuicios de siglos, añaden más leña al fuego de las dificultades que acompañan a esta parte de nuestra juventud.

El Ministerio de Educación de Cuba y la sociedad civil junto a otras entidades, estatales o no, cuentan con profesionales talentosos, listos para tomar cartas en el asunto, crear la divulgación necesaria. Solamente necesitan trabajar en paz y confianza.

El Estado necesita más personas interesadas en ser maestros y cooperantes con el sistema de enseñanza; por tanto, debe mostrar la preocupación y generosidad indispensables para ayudar mucho más a los que hoy- lesbianas y gays- son estudiantes y mañana, quién sabe, ciudadanos y ciudadanas altamente calificados, trabajadores incansables, científicos de renombre. Son cubanos y cubanas. Son merecedores del pleno disfrute de sus vidas y éxitos. Les pertenece con pleno derecho estar orgullosos de su sexualidad.

1 comentario:

Evis dijo...

Es un mal que se atrrastra desde los inicios de la creada sociedad cubana y que no ha tenido un tratamiento correcto.Bien es sabido por todos los métodos de la UMAP,la manera utilizada por el gobierno para liquidar y someter a los gay, haciendo ver que era un a enfermedad.Ha humillado artistas , intelectuales y gente común que ha visto limitada su actividad social, por tener una preferencia sexual distanta....